MOLINOS DE MEDELLÍN

Restos del molino de Matarratas, que fuera propiedad de la familia de Hernán Cortés

MOLINOS   HARINEROS   O  ACEÑAS EN MEDELLÍN

        Medellín mantenía en funcionamiento, en la segunda década del s. XX, cuatro molinos harineros aprovechando la fuerza hídrica de los ríos Guadiana y Ortigas. Algunos de ellos estuvieron en funcionamiento en los años posteriores a la Guerra Civil (1936-1939).

      En 1914, Rodríguez Gordillo nos describe así este recurso económico de la Villa: "... tiene esta [Villa] cuatro molinos harineros" (Apuntes Históricos de la Villa de Medellín, p. 774) 

 

MOLINO DE MATARRATAS: 

   Estaba situado junto al Puente del mismo nombre, apenas 200 m, río abajo. A mediados de la década de los años 60 del pasado siglo quedaba poco más que la cimentación y algunos lienzos discontinuos de pared que en pocos casos sobrepasaban el metro de altura.

     "... tiene esta [Villa] cuatro molinos harineros; uno a poco más de un kilómetro, en el río Ortiga, que solo muele en el invierno, y se llama Molino de Matarratas; con este mismo nombre fue propio de D.a Catalina Pizarro y su hijo Hernán-Cortés el año 1529, según consta de la escritura otorgada por ambos, [...]: después pasó a ser propiedad del Sr. Conde de las Atalayas, y con su Palacio y otras fincas, vino a ser como es hoy, propio de D. Jacinto Sáez Temple, vecino de Don Benito: tiene dos piedras, y producen de 50 a 60 fanegas de trigo poco más o menos, hoy renta 600 reales de renta anual:" (Rodríguez Gordillo, E. Apuntes... pp. 774-775)

 


46. He visto una escritura que está en el archivo de la parroquia de San Martín: por la cual Don Hernando Cortés y su madre hacen donación de la hacienda que tenían en Medellín a Juan Altamirano, su deudo, por haber recibido de él buenas obras... Y lo que donan y señalan es un molino en Ortiga, que hoy llaman Matarratas, un colmenar en al Merchana, una viña en la Vega, 5320 maravedis, de censo, impuestos sobre casas de particulares y nueve fanegas de trigo de renta. La cabeza dice así, sepan cuantos esta carta de donación vieren, como yo doña Catalina Pizarro, mujer que fui de Martín Cortés ya difunto, que santa gloria haya, y yo don Hernando Cortés su hijo, Marqués del Valle, otorgarmos, &c.} Su fecha en Mérida, un miércoles primer día del diciembre del año 1529. En el cual se había despachado el Título de Marqués a seis de julio.  

(SOLANO DE FIGUEROA, JUAN (1650): Historia y Santos de Medellín. Impreso en Madrid por Francisco García y Arroyo, Impresor de Reino. p. 131

 

Artículos en que se cita este molino, propiedad de la familia de Cortés:  

 

LA MOLINETA:

    Situada en el margen derecho del Guadiana, al pie del cerro de Remondo -frente a la charca de pesca-, próxima a las instalaciones de EXVEAL S.L., se podían apreciar hasta los años ochenta del siglo pasado las ruinas de este molino. Era el lugar elegido por los metelinenses para celebrar su gira, el Lunes de Pascua, a comerse las bollas.

   "... en el río Guadiana, frente al cerro Remondo, como a dos kilómetros del pueblo, está la llamada Molineta, que es propio hoy de Pedro Gómez y otros vecinos de Don Benito; también tiene dos piedras, pero como muele todo el año, produce unas 120 fanegas de trigo de renta anual, y hoy 2.500 reales; su construcción es poco sólida, y especialmente su techumbre, ha sido varias veces arrastrada por las aguas, en las varias crecidas que suele tener el rio, a cuya margen derecha se halla construido este molino:" (Rodríguez Gordillo, E. Op. cit. p. 775)

 

EL MOLINO DE LOZANO:

       Es el molino más conocido, por su cercanía al pueblo y por su estado de conservación, debido en gran parte a su solidez constructiva. En época de ríadas grandes ha quedado totalmente cubierto por el río Guadiana. A comienzos de los años 70, del siglo pasado, fue testigo del auge que tomaron los baños en la naciente  "Playa de Medellín", llegando a utilizarse como chiringuito.

Otra imagen de la casa del Molino de Lozano, de los años 60.

     "... en la margen izquierda, poco por bajo de donde se une el Ortiga a Guadiana, está el molino llamado del Puente, a unos 800 pasos de él: es de varios dueños, y su mayor partícipe D.ª María Lozano Sánchez, viuda de D. Francisco Puente; es de muy sólida construcción, tanto en sus muros como en su bóveda o techumbre, y por eso suele resistir el empuje de las aguas en las crecidas del río, que le cubre, y hasta llegar a alcanzar un metro y aun más de altura el agua, sobre la bóveda de este molino: tiene cuatro piedras, y producía 300 fanegas de trigo de renta anual, y ahora tan solo 2.000 pesetas y a veces hasta 360, según la pericia y laboriosidad de los molineros; tiene una regular casa con todas las dependencias necesarias para habitación de los molineros, y además, se ha hecho un espacioso encerradero o cebadero para los cerdos; éste y la casa están a bastante altura sobre el nivel ordinario de las aguas del río:" (Rodríguez Gordillo, E. Op. cit. p. 776)

 

 EL MOLINO DE MARIDÍAZ (El Salto):

      Este molino, situado en el lugar conocido hoy como el "Puntal de la Sierra de Yelbes" o "el Salto", por razones obvias, existió como tal hasta 1914, fecha en que se destruyó para reconvertirlo en un salto de agua para para producir electricidad. Fue propiedad del Convento de las Madres Agustinas y desató mucha polémica por la normativa que establecía el contrato de arriendo, respecto de preferencias de vecinos de la villa y forasteros a la hora de moler:

    "... a unos tres kilómetros de esta villa, en el sitio llamado «Puntal de la Sierra de Yelbes», estaba el otro Molino llamado de Maridiaz: [...] que fue propiedad de estas Religiosas [Madres Agustinas], [...]: este Molino fue propio de don Gabriel Barragán, vecino de esta villa, dicho molino tiene cuatro piedras, molía como el del Puente todo el año, y sin embargo, por no estar tan atendido como aquel, solo produce unas 160 fanegas de trigo y últimamente 1.000 pesetas de renta en cada un año. [...] (1) Hoy está destruido y junto a él se ha construido una gran fábrica para luz y harina, utilizando como motor el salto de agua. (Rodríguez Gordillo, Op. cit..., pp. 776-777).

 

     "Un molino [...] que ha existido hasta el año pasado 1914, que se destruyó para construir una Fábrica de Motor Eléctrico, cuyo molino se llamó de «Mariediar» (sic); tenía cuatro piedras, de las cuales dos se habían de destinar al servicio de los vecinos de esta Villa y los otros dos al de los forasteros que concurriesen a moler, Y habiendo surgido cuestión entre el Ayuntamiento, los vecinos de esta Villa y los forasteros, entre éstos dos últimos por pretender los vecinos que habían de ser preferidos a los forasteros en el de todas las piedras; y entre el Ayuntamiento y los molineros, por tratar de obligar aquél a éstos a que diesen gusto a los vecinos entre sus injustas pretensiones y contra los que las Religiosas habían estipulado en el contrato de arriendo, obligando a los molineros a que distribuyesen el servicio de las cuatro piedras en la forma ya dicha. El asunto tomó tales proporciones que motivó una Real orden, en la que después de especificar detalladamente el litigio seguido en la Cancillería de Granada dice Así:

«Por lo cual os mandamos que siendo con esta nuestra Carta requeridos, observéis y hagáis observar la preferencia concedida a los vecinos de esta Villa, en las dos muelas en el invierno cuando muelen las cuatro; y en el verano cuando sólo muelan dos o tres, se entenderá la preferencia en una o en dos si moliesen tres, y en la otra guardarán vez y turno, con los forasteros que acudiesen, moliendo cada uno cuando le tocase, según hubiese puesto el grano en el molino; pena de 30.000 maravedís, para nuestra Cámara. Dado en Madrid a 14 de Marzo de 1781.» (Rodríguez Gordillo, Op. cit..., pp. 217-219)

 

El Salto. Antiguo molino, en el Puntal de la Sierra de Yelbes,

reconvertido en Estación Hidroeléctrica.

 

ACEÑA O ACEÑAS DEL MARTEL, EN LAS PROXIMIDADES DE MEDELLÍN

        Rodríguez Gordillo, en su descripción del territorio del Condado de Medellín se refiere también a unas aceñas -creemos que en realidad se trata de una sola- en las proximidades de Medellín. Se trata de un/varios? molino/s harinero/s situados en el Guadiana, próximos a Medellín, pero en el término municipal de Don Benito, tras su segregacion del Condado, en 1735. En cualquier caso, procede investigar este punto, pues no conocemos otro resto de molino harinero que el que hubiera servido de base a la Central Electríca situada en las proximidades del D. Llorente, al final del camino del Martel.

       El sacerdote erudito cita "... las aceñas que llaman «del Conde»" (p. 34), como un lugar del Guadiana, entre Medellín y Don Benito, donde el río Guadiana, en el s. XVII, modificó su curso. Y cuando detalla la biografía de D. Gonzalo Pérez Martel, vuelve a insistir sobre este tema:

    "... fue paje de los Reyes Católicos, Gentil Hombre de la Casa Real, Maestre de Campo, General del Tercio de Extremadura y Embajador Extraordinario cerca de los Reyes de Portugal D. Alonso y D.ª Juana, en nombre de los Reyes Católicos para tratar de los medios que se habían de adoptar para conseguir la pacificación de los dos Reinos; para los gastos de esta Embajada vendió las Aceñas o molinos que poseía en el Río de Guadiana1, cerca de Medellín, las que, aunque han mudado muchas veces de dueños, han conservado su nombre, pues siempre se han llamado y se llaman hoy «Aceñas de Martel»" (p. 310) 

 

     En otro lugar se cita, de forma expresa, sólo una aceña en el Martel. Refiriéndose a las fundaciones piadosas que se hicieron en la Parroquia de Santa Cecilia dirá:  

    "... El Presbítero D. Tomás Antonio de Ocampo, Beneficiado de esta Iglesia y su hermana D.ª Beatriz [...], fundaron dos Capellanías, con carga cada una de doscientas cincuenta misas cada año, ... [...]; toda esta carga quedó gravada en la aceña llamada de Martel. (p. 176)

 


 1. Tenemos noticias de otras dos aceñas, relativamente próximas a Medellín, a las que posiblemente pudiera extenderse la denominación de aceñas del Martel, aunque no tenemos constancia documental: el Molino de las Aceñillas, próximo a la desembocadura del Río Ruecas en el Guadiana (39.000678, -5.910572); y otro, río arriba, próximo a los puentes sobre el Guadiana de la Ex-A2 y Ex-106, denominado Molino de la Aceña (38.999741, -5.862442).

 

 © Tomás García Muñoz. 

 Asociación Histórica Metellinense

13 de noviembre de 2020

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